Se deben seguir las indicaciones dadas, realizar los lavados, controlar los factores ambientales, hidratar y tener un aseo nasal constante, vigilar la temperatura. Las infecciones virales no requieren ningún manejo antibiótico, si se ve que el bebé no mejora, presenta dificultad para respirar, fiebre, se debe acudir nuevamente a una valoración presencial.