La presencia de silbidos en el cuerpo, únicamente sucede cuando los bronquios están cerrados y no pasa adecuadamente el aire por los pulmones, lo que se relaciona directamente con el Asma. Recordar que el Asma es una enfermedad crónica que puede controlarse pero no necesariamente curarse y en episodios de estrés, ansiedad, frío o esfuerzo físico puede exacerbarse y presentar síntomas. Es recomendable que se consulte al médico tratante para estudiar adecuadamente la ansiedad y dar un manejo adecuado. Recordar que se puede tratar de mantener la calma cuando se sienta que falta el aire, pero lo que va realmente abrir los pulmones es el inhalador, el cual, si se utiliza correctamente y no con dosis elevadas, no causan taquicardia o temblor.