Lo que se debe hacer es evitar cambiar las comidas, por ejemplo, si se prepara carne para el almuerzo y ella no quiere comérsela, no se la cambie por pollo o por lo que ella esté pidiendo, lo mismo que se come en las comidas, debe comerlo su hija. Darle el mejor ejemplo al sentarse a la mesa, no TV, no juegos, no celular, comer balanceado. Si ella no desayuna, no le de refrigerio, si tiene hambre, servirle nuevamente lo que no se comió de desayuno y así con todas las comidas. Nunca darle lo que pida cuando no se haya comido previamente lo que se haya preparado. No la obligue a comer, el hambre en algún momento (más temprano que tarde) la hará comer. Es un proceso largo, pero se debe ser fuerte. Además recordar que todas las personas que estén encargadas del cuidado de su hija, deben hacer exactamente lo mismo.