Ese tipo de dolor es secundario a procesos inflamatorios de las costillas y los cartílagos de éstas, secundario a estrés, ansiedad, golpes, procesos infecciosos como Gripe, tos, entre otros. En personas jóvenes los dolores en el pecho tienen un probabilidad muy baja de ser de origen cardíaco, por lo cual se puede estar tranquilo. El dolor de origen costocondral solo requiere analgésicos.