Las mujeres jóvenes con periodos irregulares pueden presentar ese tipo de ausencias menstruales sin que estén en embarazo por alteraciones hormonales. Si el retraso llega a 3 meses, y se descarta un embarazo es recomendable una valoración presencial con el ginecólogo para descartar alteraciones como síndrome de ovario poliquístico el cual puede generar ese tipo de síntomas.