Los efectos secundarios más frecuentes son sequedad de boca, sensación de sedación, visión borrosa, estreñimiento, retención urinaria, somnolencia, Hipotensión Ortostática y taquicardia, temblores musculares, nerviosismo o inquietud, síndrome Parkinsoniano (dificultad al hablar o tragar, pérdida del equilibrio, cara de máscara, etc.); arritmia cardíaca, cambios en el electrocardiograma. Sin embargo, recordar que aunque los efectos adversos están descritos, no se presentan en el 100% de las veces. En cuanto a la dependencia, es muy baja la tasa.