Para el diagnóstico de una u otra condición se pueden sumar varios aspectos: 1) Los signos y síntomas que se encuentren en el examen físico: Miocarditis: Es posible que no haya síntomas, pero de presentarse, pueden ser similares a la Gripe y pueden ser: Latidos cardíacos anormales, dolor torácico que se puede asemejar a un ataque cardíaco, fatiga, fiebre y otros signos de infección, incluso dolor de cabeza, dolores musculares, dolor de garganta, diarrea o erupciones cutáneas, inflamación o dolor articular, hinchazón de las piernas, dificultad respiratoria, otros síntomas que pueden ocurrir con esta enfermedad: Desmayo, a menudo relacionado con ritmos cardíacos irregulares, disminución del gasto urinario. Endocarditis: Los síntomas de Endocarditis se pueden desarrollar de forma lenta o repentina. La fiebre, los escalofríos y la sudoración son síntomas frecuentes. Estos algunas veces pueden: Estar presentes durante días antes de que aparezca cualquier otro síntoma, aparecer y desaparecer o ser más notorios durante la noche; también se puede presentar fatiga, debilidad y dolores en los músculos o articulaciones. Otros signos incluyen: Pequeñas zonas de sangrado bajo las uñas (hemorragia lineal subungueal), manchas cutáneas (piel) rojas e indoloras en las palmas de las manos y en las plantas de los pies, (lesiones de Janeway), ganglios rojos y dolorosos en las yemas de los dedos de la manos y de los pies, (nódulos de Osler), dificultad para respirar con la actividad, inflamación de pies, piernas y abdomen. El resto puede ser diagnosticado por diversos exámenes de sangre o imagenología como ecocardiografías, hemogramas, rayos X, TAC, etc.