Si a los 15 años de edad ya se está hablando de intoxicación por sustancias de este tipo, las cosas podrán complicarse en adelante. Lo más importante es que se entienda el riesgo, se conozca, se prevenga, se supere para bien propio y de todos los que le rodean. Por ahora, poco se puede hacer puesto que ya la sustancia ha entrado al cuerpo, a la sangre, a los pulmones y el daño ya está hecho.