Es muy temprano para decir que se trate de un embarazo, además, incluso si lo fuera, un embarazo no debe cursar con cólicos abdominales ya que si así fuera se trataría de una sospecha de aborto, por ejemplo. Un óvulo fecundado en una relación sexual se toma entre 7 a 8 días para empezar apenas el proceso de implantación en el útero y ese proceso tampoco produce cólicos.