Aunque la piel cierra rápidamente, aproximadamente 10 días después del procedimiento, los tejidos que se encuentran en el interior tardan un poco más por la manipulación que se realiza. Por lo tanto si el dolor o la picazón es ocasional, es normal. Si al contrario, es un dolor frecuente, intenso y limitante, se debe consultar inmediatamente al médico tratante para descartar algún tipo de alteración de la pared abdominal, como por ejemplo una Hernia.