En los bebés es frecuente observar ese tipo de situaciones, lo que se debe hacer es vigilar por ahora los síntomas y estar al pendiente de signos de alarma respiratorios, despejar la congestión de la cavidad nasal con el uso de suero fisiológico en spray y lavados nasales para mejorar la respiración del bebé. Signos de alarma respiratorios: Fiebre alta de 39 o más grados centígrados, coloración morada de extremidades o piel, respiración acelerada o agitada, retracción de músculos subcostales, irritabilidad constante y disconformidad general, aleteo de la nariz.