La Dishidrosis es una alteración en la sudoración que produce como consecuencia, eczemas (resequedad, descamación) y otras lesiones en la piel. El tratamiento depende de cada paciente ya que se debe valorar la severidad de los síntomas, las lesiones que se producen, entre otras variables que solo pueden identificarse en una consulta presencial. Se recomienda que se continúen los controles con dermatología, hidratar la piel con cremas que no tengan alcohol ni perfumes, evitar el rascado y la automedicación.