Hay una serie de alteraciones en cuanto a esto que se refiere, sin embargo es necesario saber si este exceso de sudoración se presenta aun en invierno y si se acompaña de otros síntomas; por otro lado se debe tener en cuenta que el número de glándulas sudoríparas en las diferentes zonas del cuerpo varía de una persona a otra y este es un mecanismo de refrigeración natural, lo que hay que confirmar es que no se trate de un estado patológico por lo cual se debe consultar con el médico para una valoración y un examen físico completo.