Respecto a los daños de las gaseosas en el organismo, no son precisamente daños. Contienen altos niveles de azúcares refinados, que en el organismo se convierten en colesterol, lo cual es nocivo para la circulación. Y por lo general, contienen cafeína y otras sustancias en el cuerpo que pueden hacer daño; además irritan la mucosa gástrica y limitan la absorción de nutrientes. Si se consumen con poca frecuencia, por lo general no hacen daño.