Durante la primera eyaculación se expulsa la mayor cantidad de semen contenida en los genitales (en promedio de 5 a 7 mls). Las eyaculaciones posteriores durante la misma relación sexual ya no serán del mismo volumen o incluso serán, nulas. El que no se logre tener una segunda erección dependerá de algo llamado período refractario o de recuperación. Este tiempo es variable y es lo que permite poder tener nuevas erecciones después de la primera. En este caso quizás este período de recuperación es largo.