En esta edad de cambio hormonal es conveniente, así como sucede en la adolescencia, que el ginecólogo haga una revisión cuidadosa de la mujer, deben ser revisados sus senos, sus ovarios, su matriz, su perfil hormonal, etc. Sólo en ese examen y con el interrogatorio se puede establecer que hay síntomas que justifiquen tratamiento de reemplazo hormonal y si no hay antecedentes que lo contraindiquen.