El café y las bebidas negras se consideran irritantes, es decir que irritan el músculo vesical y producen ganas de orinar frecuentemente, lo que se aumenta si se está tomando mucho líquido todo el tiempo. Se recomienda suspender o bajar estas bebidas y tener un buen hábito miccional (orinar cada 3-4 horas) para evitar el desacondicionamiento.