La tensión arterial o presión arterial que se considera normal está entre los 100 y 140 mm de Hg en la presión sistólica y entre 60 y 90 mm de Hg en la diastólica. Lo más recomendable sería tener una presión sistólica que no supere los 120 cm (máximo 130) y la diastólica por debajo de los 90 cm de Hg. Cabe destacar que con la edad la tensión tiende a subir, puesto que los vasos sanguíneos pierden elasticidad. Los valores normales de presión arterial son por tanto, algo más elevados que durante la edad adulta. Según lo anterior, no se tiene de qué preocuparse.