Cuando se contrae por primera vez la infección por el VIH, la persona podría no manifestar algún síntoma. Sin embargo, si se tiene una carga viral elevada el sistema inmunológico, que es nuestro mecanismo de defensa, empezará a fallar generando infecciones. Entre estas las más comunes son las del tracto respiratorio, por lo que el paciente puede manifestar cuadros neumónicos a repetición.
En conclusión, una persona puede estar infectada del VIH y no manifestar síntomas.