Primero que todo mantener la calma y recordar que no todos los niños evolucionan al mismo tiempo, es cierto que hay pautas de desarrollo pero no tienen que ser exactas, en algunas ocasiones se pueden demorar más o menos tiempo en realizar alguna actividad que esté estipulada para una edad específica. Se recomienda que se realicen actividades de estimulación para el bebé como el exponerlo a la luz del día frecuentemente, ya que la luz natural es importante para los ojos, no es recomendable mantenerlo siempre en penumbras o con luz artificial. No colocar la cuna pegada a las paredes ni en un rincón, para que pueda observar diversos objetos de la habitación. Para ayudarle a fijar la vista, colocar la cara enfrente de la del hijo y una vez que haya enfocado la mirada, mover la cabeza lentamente para que la vaya siguiendo (evitar que detrás de usted hayan cuadros o muebles, ya que puede confundirse si ve muchas imágenes distintas). Mostrarle objetos de muchas formas y colores brillantes y moverlos de un lado a otro cerca de la cara. Hacerlo a veces empezando por la derecha y otras veces por la izquierda, para estimular ambos ojos. Mover una luz suave delante de sus ojos para que se acostumbre a seguirla con la mirada. No le obligue a estar constantemente fijando la mirada, puede estar cansado y querer dormir o simplemente cerrar los ojos. Colocar un móvil en su cuna con objetos de diferentes colores y sonidos.