Lo más recomendado en estos casos es tener una dieta muy estricta, seguir las siguientes recomendaciones: La dieta debe ser con restricción total de grasa, lactosa y fibra insoluble. Leche y derivados: si se presenta intolerancia a la leche, suspender su consumo y cualquier producto que contenga leche como helados, cocoa, chocolate, cremas, yogurt y kumis. Se puede utilizar leche deslactosada o de soya. Evitar: quesos cremosos, doble crema, mozzarella, preferiblemente consumir queso campesino o queso tipo cuajada. Frutas: jugos no ácidos, frutas cocidas o procesadas, purés de fruta como pera, banano, papaya, manzana, sin cáscara. Preparaciones no permitidas: frutas secas, frutas con cáscara con semillas, jugos cítricos (maracuyá, lulo, tomate de árbol, piña). Vegetales: jugo de tomate, zanahoria, remolacha, fríjol verde, purés de vegetales cocidos o enlatados. Vegetales no permitidos: cebollas, brócoli, coliflor, repollo, cohombros, espinacas, repollitas de bruselas, arvejas y cualquier vegetal con cáscara y semillas, leguminosas con semillas o cáscara. Cereales y pan: consumir únicamente pan blanco o refinado y cereales no integrales como avena, corn flakes, arroz blanco, saltinas, crema de trigo. Evitar: ajonjolí, maíz pira, productos de pastelería con uvas pasas, nueces, coco, y semillas croissants, donnuts, galletas de dulce. Carnes y sustitutos: limitar el consumo de carne de res y cerdo magra, pescado, pollo sin piel y huevos preparados sin grasa. Evitar: carnes fritas, carnes de salsamentaria, carnes conservadas en aceites, embutidos, chicharrón y carnes preparadas con salsas. Harinas y tubérculos: limitar el consumo de papa común sin cáscara, pastas refinadas como espaguetis, macarrones, tallarines. Grasas: utilizar aceites vegetales preferiblemente para la preparación de los alimentos. Evitar: las salsas, mayonesa, mostaza y cualquier preparación frita, mantequilla de maní, comidas rápidas. Bebidas: se puede consumir café o té descafeinado. Evitar: chocolate, alcohol, bebidas achocolatadas, tinto y bebidas colas. Es recomendable comer a horarios y no saltarse comidas, comer cada 3-4 horas. Recordar que el éxito de las recomendaciones depende del paciente, si a pesar de las recomendaciones se sigue con los síntomas, lo mejor es que se reconsulte al gastroenterólogo tratante.