Los gatos son conocidos por transmitir una enfermedad que se llama la Toxoplasmosis. Esta enfermedad puede generar problemas en el bebé, pero si se tienen gatos no se tienen que regalar.
Se deben de seguir algunas normas de seguridad como evitar cambiar la arena donde defecan los gatos; si nadie puede hacer esa tarea, entonces usar guantes desechables para el cambio de la arena, además lavar muy bien las manos con agua y jabón después. Hay que cambiar la arena de la caja todos los días ya que el parásito se vuelve infeccioso entre 1 y 5 días después de ser defecado por los gatos.
Alimentar al gato con concentrado o comida enlatada, nunca con comida cruda o carnes poco cocinadas, mantener los gatos adentro, evitar gatos adoptados, callejeros o que se desconozca el origen, especialmente si son cachorros. No conseguir gatos nuevos mientras se está en embarazo.
Las cajas de arena que se pongan en exteriores deben de estar cubiertas, usar guantes siempre que se vaya a tener contacto con tierra o material donde los gatos puedan defecar como al hacer jardinería, siempre lavarse las manos con agua y jabón después del contacto con tierra o arena.