El rechazo social puede causar que una persona homosexual rechace su propia identidad sexual, y es esto lo que causa trastornos de la personalidad. Hoy día la mayor parte de la intervención psicológica está dirigida a mejorar la auto aceptación y el auto concepto de personas homosexuales y muy poco (salvo cuando promovido por algunas denominaciones religiosas) a intentar cambiar la orientación sexual de una persona.