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El control del a frecuencia cardiaca es autónomo, es decir nuestro cuerpo lo regula en función de sus necesidad.
Este control dependerá del tipo de ejercicio que se esté realizando, es decir si lo que se desea es hacer un ejercicio aeróbico se debe mantener una cadencia en trote por ejemplo, de tal forma que tu frecuencia cardiaca no supere los 160 latidos por minutos; caso contrario es si se realiza un ejercicio anaeróbico como el levantar pesas, en este caso se puede aumentar mucho mas la frecuencia cardiaca.
Actualmente existen varios dispositivos que permiten monitorear la frecuencia cardiaca como relojes o brazaletes y viendo en vivo la frecuencia puedes aumentar o disminuir la intensidad del ejercicio. Si quiere realizar actividad física basado en ello te recomiendo consultar con un médico deportólogo para poder realizar un plan adecuado a tu edad, estatura y objetivos.
Espero haber resuelto tu inquietud, no dudes en preguntarnos nuevamente y cuéntanos si te ha resultado útil esta respuesta.