Para tener unos dientes blancos en primera instancia, se debe tener un buen lavado e higiene dental con cepillado, mínimo 3 veces al día, usar el hilo dental y enjuague bucal con blanqueador. Se debe procurar no consumir bebidas negras (café, chocolate, gaseosa) y evitar el tabaquismo. Si se desea un blanqueamiento profesional se debe consultar al odontólogo para realizar sesiones de Peróxido para lograr el tono blanco adecuado.