La Gastritis Atrófica crónica es un proceso inflamatorio de la mucosa estomacal y de larga duración, que disminuye la funcionalidad del órgano. No es una condición que se pueda curar pero se puede controlar con cambios en los hábitos de alimentación y medicación. Será necesario que el paciente aprenda a manejar estrés y ansiedad y que ingiera alimentos en horario fijo, mínimo tres veces al día. Se deben tener controles periódicos con el médico.