A la Sífilis se la llama la gran imitadora, porque tiene muchísimos síntomas posibles y muchos de estos se parecen a los síntomas de otras enfermedades. La llaga de Sífilis que aparece, justo después de infectarse por primera vez no produce dolor y puede confundirse con un pelo encarnado, una cortadura con un cierre u otro golpe que no parece dañino. El sarpullido que aparece en el cuerpo durante la segunda fase de la Sífilis y que no produce picazón, se puede producir en las palmas de las manos y las plantas de los pies, de color pardo o marrón, por todo el cuerpo o solo en algunas partes. Se podría estar infectado por la Sífilis y tener síntomas muy leves o no presentar ningún síntoma.