No hay evidencia de que el uso del tampón se relacione con un aumento en los episodios de cistitis u otra infección ni urinaria ni vaginal, obviamente relacionado con el adecuado uso de los mismos: cambio de tampones cada 6 - 8 horas máximo dependiendo del sangrado, higiene vaginal adecuada, lavado de manos antes y después del uso del tampón.