Un bebé de tres meses tiene inmadurez en sus sistemas digestivo, urinario, pulmonar, etc, y también tiene un inadecuado horario para el sueño. En la medida en que vaya madurando su aparato digestivo, por ejemplo, hará que coma más cantidad, lo cual dará saciedad que le permitirá dormir un poco más y así con el paso del tiempo, hasta que ya esté cerca de un año, estará pasando la noche tranquilo sin despertar. Lo único para hacer es tener paciencia y facilitarle al niño su sueño y entender sus necesidades puntuales.