Es normal que una persona sienta deseo de tener relaciones sexuales y también es normal que este deseo baje en momentos o situaciones de estrés, sin embargo cuando el interés o el deseo disminuye de manera persistente, no es normal. Existen distintas causas para que esto suceda, algunas orgánicas (causadas por enfermedades como la Hiperprolactinemia por ejemplo) y otras mentales. La recomendación es consultar con el médico internista o con el urólogo, para que lo valore y estudie el caso. De esta manera se darán tratamientos según se necesiten.