En ocasiones ocurre que no se logra el orgasmo por situaciones ajenas a la relación sexual, por ejemplo el estrés y dificultades específicas. Se debe evaluar mas allá de la situación sexual, qué puede estar afectando. También la lubricación puede estar afectando. Con respecto al licor, éste puede tener ese efecto. La comunicación con la pareja es clave para lograr una buena relación sexual.