La Fibromialgia no tiene una cura como tal y va a presentar periodos de control adecuado del dolor y otros donde no es así. Los factores más importantes son: El control del estrés, la ansiedad, tener una dieta adecuada, realizar actividad física, el uso de analgésicos a necesidad según la severidad del dolor y fisioterapia que se determina, mediante una valoración presencial, por lo cual es recomendable ser valorada por su médico tratante.