Lo más recomendable en este caso es consultar, ya que un examen físico puede guiar al diagnóstico, además si ya se recibió manejo lo mejor es prestar atención a las lesiones. Evitar las comidas condimentadas y muy calientes, no consumir ácidos, tomar abundante agua y mantener una higiene oral adecuada (cepillado, seda dental y enjuague bucal después de cada comida).