El tener o no sexo anal depende de cada persona, no hay una forma específica ni medicamentos para liberar la mente o perder el miedo. Lo que sí debe tener en cuenta, si va a tener relaciones anales, es que debe existir una lubricación muy buena y la penetración debe ser lenta para evitar el dolor; y no olvidar que su pareja use preservativo para disminuir el riesgo de enfermedades de transmisión sexual.