Si tiene problemas de presión arterial el mayor riesgo que puede presentar es una preeclampsia o una eclampsia como muy extremo. Si está teniendo contracciones, lo mejor es que se haga un monitoreo para ver que todo esté bien y que el bebé no venga en camino aún. Los embarazos suelen desencadenar partos entre las semanas 38 y 40 en el 90% de los casos.