Pues el sueño en horas no habituales, es decir, de día o en horas de trabajo puede querer decir algunas cosas como: mala calidad del sueño nocturno o pocas horas de buen sueño nocturno. Esto es problemas como ronquidos, tapazón nasal, apnea del sueño que hacen que esas horas del dormir no sean de descanso y por ello se duerme en el día.
También pueden ser problemas de anemia, de desgaste por alguna infección reciente viral o bacteriana que le bajó las defensas, posterior a partos o a lactancias, ejercicios o deportes muy intensos, etc.