La cervicitis es causada por una infección que debe ser tratada durante el embarazo ya que si no se hace puede traer consecuencias como parto prematuro o ceguera y alteraciones neurológicas en el bebé. En cuanto a la lesión intraepitelial se debe hacer un seguimiento postparto. Por el momento no causa complicaciones al bebé pero es importante que este resultado lo conozca el ginecólogo que la está tratando, precisamente para poder hacer el seguimiento adecuado.