Lo ideal en estos casos es realizarle un lavado nasal. Esto promoverá que el moco se fluidifique y pueda eliminarlo con mayor facilidad.
- Consiga solución fisiológica o salina al 0.9%, de no conseguirlo puede poner a hervir agua con una pizca pequeña de sal.
- Llene una jeringa de 3cc con la solución.
- Retire la aguja.
- Cubra una fosa nasal de su bebé y aplique a irrigación la solución en la fosa nasal libre.
- Cambie de lado y repita el procedimiento en la otra fosa nasal.
- Vigile la temperatura corporal de su bebé. Lo recomendable es hacerlo cada 4 horas, en caso de presentar fiebre o cifras mayores a 38° C, o alguno de los siguientes síntomas, acuda en forma inmediata a valoración médica presencial.
- Dificultad para respirar franca.
- Tos que le asfixia o le provoca vómito y asemeja el ladrido de un perro o el canto de un gallo.
- Hundimiento de las costillas.
- Respiración rápida y superficial.
- Aleteo nasal.
- Cambio de coloración en mucosas o boca (moradas o anuladas)
- Decaimiento.
- EVITE LA AUTOMEDICACIÓN EN SU BEBÉ.
Espero haberle orientado, en caso de tener otra inquietud, vuelva a escribirnos. Gracias por su confianza.