La Metformina es un hipoglicemiante oral que sirve para reducir la producción de glucosa del hígado, ayuda a que el tejido muscular aproveche mejor la glucosa así como el efecto de la insulina. Sus efectos secundarios son: náuseas, diarrea, vómito, dolor abdominal y pérdida de apetito. Si persisten estos síntomas debe consultar a su médico para evaluar la pertinencia del tratamiento.