Por lo general se usa la misma técnica que para perforar para los aretes, lo que cambia es la ubicación nada más. Pero igual se debe perforar el cartílago de la oreja para poner inmediatamente el piercing. Eso se debe hacer con las medidas de higiene adecuadas, por una persona capacitada para hacerlo y con materiales estériles para evitar infecciones.