Los aparatos electrónicos para la toma de la tensión ambulatoria muestran un valor para la tensión arterial: presión arterial sistólica y la diastólica, los cuales para una persona hipertensa deben estar entre los valores de 130/80 mmhg y mayor a 90/60 mmhg. Si los valores se encuentran por fuera de estos rangos deben consultar al médico para evaluar la medicación durante su próximo control.