Llega a ser normal debido a la exposición solar prolongada lo cual causa un cambio de coloración en la piel y la consecuente aparición de las lunares o también llamados nevos. Habitualmente cada persona cuenta con entre 20 a 40 lunares en todo el cuerpo. Si no te gustan es necesario acudir con un dermatólogo para quitarlos en caso que tengas sospecha de cáncer de la piel o sean incómodos.
En los lunares la guía «ABCDE» puede ayudarte a determinar si un lunar o una mancha pueden ser un melanoma u otros tipos de cáncer de piel ya sea que tenga una o varias de éstas características, es vital tomarlas en cuenta:
- La letra «A» representa la asimetría. Una mitad es diferente de la otra.
- La letra «B» representa el borde. Busca lunares que tengan bordes irregulares, cortes u ondas.
- La letra «C» representa el color. Busca crecimientos que hayan cambiado de color, que tengan muchos colores o que presenten un color irregular.
- La letra «D» representa el diámetro. Busca nuevos crecimientos en lunares que tengan más de 6 milímetros, o superen el tamaño de una goma de lápiz.
- La letra «E» representa la evolución. Presta atención a los lunares que cambian de tamaño, forma, color o altura, en especial, si parte de un lunar o su totalidad se vuelve negro. Los lunares también pueden evolucionar y producir nuevos signos y síntomas, como picazón o sangrado.
Las medidas preventivas para evitar mayor aparición de lunares y vigilancia de los existentes se encuentran:
- Familiarízate con la ubicación y patrón de tus lunares. Examínate regularmente la piel para detectar cambios que puedan indicar la presencia de cáncer en la piel. Hazte autoexámenes una vez al mes sobre todo si tienes antecedentes familiares de cáncer. Hazte un examen de cuerpo entero con la ayuda de espejos que incluya el cuero cabelludo, las palmas y las uñas de los dedos de las manos, las axilas, el pecho, las piernas y los pies, incluidas las plantas de los pies y los espacios que hay entre los dedos. Revisa también el área genital y entre los glúteos.
- Evita las horas en las que el sol está más fuerte. Entre las 10 a. m. y las 4 p. m. Programa actividades al aire libre para otros momentos del día, incluso en días nublados o en invierno.
- Usa protector solar todo el año. Aplícate protector solar alrededor de 30 minutos antes de salir al aire libre, aún en los días nublados. Utiliza un protector solar de amplio espectro que tenga un factor de protección solar de al menos 30. Aplícatelo generosamente y vuelve a aplicarlo cada dos horas, o con más frecuencia si estás nadando o sudando.
- Cúbrete. Las gafas de sol, los sombreros de ala ancha de al menos 7cm, las mangas largas y otra ropa de protección pueden ayudarte a evitar los nocivos rayos UV. Además, es aconsejable que uses prendas fabricadas con tela especialmente tratada para bloquear la radiación UV.
- Evita las lámparas de bronceado y las camas solares. Las lámparas de bronceado y las camas solares emiten radiación UV y pueden incrementar el riesgo de padecer cáncer de piel.
Espero esta información te sea de utilidad, estamos a tus órdenes.