Puede provocarlo, debido a que es una bacteria, ésta puede provocar inflamación en varias zonas del cuerpo, así como los ganglios se inflaman secundario a la inflamación general que puede llegar a provocar la bacteria; al eliminarse la bacteria causante se interrumpe la inflamación y todo vuelve a la normalidad, si persistiera por más tiempo es necesario acudir a su médico y realizar más estudios y descubrir la causa.
Por lo general, las bacterias Escherichia coli (E. coli) viven en los intestinos de las personas y de los animales sanos. La mayoría de las variedades de Escherichia coli son inofensivas o causan diarrea breve en términos relativos. Sin embargo, algunas cepas particularmente peligrosas, pueden causar cólicos abdominales intensos, diarrea con sangre y vómitos.
Puedes estar expuesto a la Escherichia coli proveniente del agua o de los alimentos contaminados, sobre todo de los vegetales crudos y de la carne de res molida poco cocida. Los adultos sanos se recuperan de la infección por la Escherichia coli, pero los niños pequeños y otros adultos corren un riesgo más elevado de manifestar una forma de insuficiencia renal que puede poner en riesgo la vida.
Algunos de los métodos para prevenir la infección son:
- Cocina las hamburguesas hasta que alcancen los 70 °C. Las hamburguesas deben estar bien cocidas, sin que se vea ninguna parte rosada en la carne. Pero el color no es un indicador confiable para saber si la carne terminó de cocinarse o no. La carne, en especial si se cocina a la parrilla, puede tomar un color marrón antes de que esté cocida por completo, por eso es importante usar un termómetro para carnes a fin de asegurarte de que la carne alcanzó, por lo menos, los 70 °C en la parte más gruesa.
- Bebe leche, jugos y sidra pasteurizados. Todos los jugos en caja o en botella que se conservan a temperatura ambiente probablemente están pasteurizados, incluso si la etiqueta no lo dice.
- Lava los alimentos crudos con cuidado.
- Lava los utensilios. Usa agua caliente y jabón para lavar los cuchillos, las mesadas y las tablas para cortar, antes y después de que entren en contacto con los alimentos frescos o la carne cruda.
- Mantén separados los alimentos crudos. Esto comprende usar distintas tablas para cortar para la carne cruda y los alimentos crudos, como las verduras y las frutas. Nunca pongas las hamburguesas cocidas en el mismo plato que usaste cuando estaban crudas.
- Lávate las manos. Lávate las manos después de preparar o comer la comida, de ir al baño o de cambiar los pañales. Asegúrate de que los niños también se laven las manos antes de comer, después de ir al baño y después de tocar animales.
Espero y esta información sea de utilidad, estamos a sus órdenes.