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Si, ya que todos esos datos son consecuencias del proceso normal del embarazo.
Confome avanzan los días, el peso del bebé y de las estructuras que lo acompañan (placenta, líquido amniótico) cambian en cuanto al tamaño y al peso, que es un peso que tu cuerpo no está acostumbrado a añejar, lo que ocasiona el dolor de espalda. Al mismo tiempo, los órganos internos sufren una modificación en cuanto a su espacio anatómico, ya que el útero los “aplasta”, modificando la frecuencia de las micciones.
Es importante que acudas a las consultas de seguimiento de tu embarazo, para poder detectar posibles patologías en estadios tempranos y poderlas tratar con prontitud, así como la administración de las vacunas al tiempo que son necesarias.
Quedamos atentos ante cualquier duda que puedas tener más adelante.