No es que sea malo comer de noche, lo recomendado es cenar liviano ya que al dormir nuestro proceso de digestión se hace más lento, en especial con alimentos ricos en proteínas como la carne, lentejas, fríjoles, etc. De modo que si come alimentos en grandes cantidades o con gran contenido de proteínas puede tener síntomas digestivos como sensación de llenura, cólicos, distensión, reflujo, entre otros. La recomendación es cenar alimentos livianos y en una cantidad moderada.