Los drenajes timpánicos o tubos de ventilación se usan en casos en los que los niños presentan otitis medias a repetición y esto lleva a que retengan líquido (moco) en el oído medio que a largo plazo puede incluso comprometer la audición. Este manejo evita eso ya que drena el líquido mejorando las presiones y evitando la reinfección. Con el tiempo se expulsan solos.