Los Corticosteroides han sido los fármacos más utilizados en el tratamiento de la GE, especialmente tras fracasos del tratamiento dietético, siendo especialmente recomendada la Budesónida por su capacidad para alcanzar el intestino delgado distal y el colon. Aquellos pacientes dependientes o refractarios a los esteroides podrían ser tratados con Azatioprina. Sin embargo en este caso y debido a que se trata de una entidad poco frecuente, debe seguir las recomendaciones de su médico tratante.