Durante las relaciones sexuales se puede producir alguna lesión en la piel del glande provocada por la fricción con los genitales de la pareja, vagina o elementos externos. Por el momento debe tener reposo sexual para generar una adecuada restauración y cicatrización, mantener una adecuada higiene con jabón neutro, revisar la lubricación durante la relación sexual. De ser inadecuada puede utilizar algún lubricante para así evitar este tipo de lesiones.