Por ahora dejar de usar esos zapatos, lavar bien los talones. Si es posible usar calzado que no roce el lugar donde están las ampollas, hágalo. Se aconseja en lo posible comprar el calzado en las horas de la tarde, porque en las mañanas los pies están descansados y son un poco más "delgados" que en las tardes. Compre zapatos que le queden cómodos, que no queden flojos ni muy justos. Un buen zapato debe sentirse bien desde el momento mismo en que se lo prueba.