Siempre que hay perforaciones para colocación de piercings, existe el riesgo de infección. Sin embargo puede tener estos cuidados para evitar el proceso: Nunca tocar el piercing ni la zona con las manos sucias, lavar la zona 2 o 3 veces al día con un jabón antiséptico, evitar rozar la zona con cualquier objeto, no nadar en piscina ni agua de río durante el proceso de cicatrización.